De acuerdo con una nota publicada por el sitio web de la corporación Televicentro, el pasado 25 de agosto, Espinal permaneció aproximadamente dos semanas alejada de las redes sociales, por ser objeto de burlas y amenazas.
A través de un video, tomado de su cuenta en la red social de Instagram y publicado en la nota de Televicentro, la periodista expresó lo siguiente: “Comprendo que compartir mi privacidad, mi vida, mis sentimientos en las redes sociales, estoy expuesta al escrutinio público… pero cuando esto escala a un nivel de linchamiento virtual, violencia de género, amenazas de muerte, acoso despiadado me inclino que no tiene sentido seguir en redes”
Aclaró que su trabajo en redes, en radio y en televisión, no tiene solo el objetivo de entretener. “utilizo estas plataformas para tocar temas sensibles, temas tabúes, para crear conciencia sobre temas que a la gente no le gusta tocar”.
“El ciberacoso es una plaga que está destruyendo vidas de niños, adolescentes y adultos a nivel mundial y nadie debe pasar por una situación de estas”, detalló.
Espinal cuenta con una trayectoria de 15 años en medios de comunicación.
La Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), destaca como formas frecuentes de violencia en línea hacia mujeres periodistas acciones tales como “el monitoreo y acecho, la publicación de datos personales, trolling, el desprestigio, la difamación o la descalificación, y el odio viral”.
Mientras que la Relatoría especial sobre Libertad de expresión, de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (RELE-CIDH), en su informe Mujeres periodistas y libertad de expresión, destaca que la violencia en línea “es una extensión de una situación estructural de violencia sistemática perpetrada por parejas, exparejas, allegados, desconocidos e incluso las instituciones gubernamentales y otros actores relevantes