Caracas, 13 de noviembre (IPYS Venezuela)-. Funcionarios de la Conatel cerró las instalaciones de la emisora Rumbera 94.7 FM en Cojedes el viernes 13 de noviembre. Funcionarios del ente regulador de las comunicaciones en Venezuela alegaron que la salida del aire de la estación radial se debía al vencimiento de la concesión del medio.
1/3 #AvanceIPYSve | Comisión de @Conatel cerró Rumbera 94.7 FM en #SanCarlos, #Cojedes, alegando "problemas con la concesión", e incautó el enlace, computadoras, micrófonos, una consola y se encuentran en este momento camino al cerro La Gloria para buscar el transmisor. #13Nov
— IPYS Venezuela (@ipysvenezuela) November 13, 2020
Los funcionarios también se llevaron los equipos con los que operaba la emisora (consola, computadora, micrófonos, enlace y transmisor). Carlos Borjas, director de Rumbera 94.7 FM, dijo que este tipo de acciones constituyen una violación a la libertad de expresión consagrada en la Constitución de la República.
Borjas también señaló que “esto es una retaliación por parte del Gobierno regional en virtud de que la ciudadanía usa los micrófonos de esta estación para exponer sus quejas y denuncias”, y agregó que realizarán las acciones legales correspondientes para recuperar la señal y volver a estar nuevamente al aire.
En la comunicación firmada por Jorge Elieser Márquez Monsalve, director general de la Conatel, se destacó que la comisión “resolvió ordenar el inicio de un Procedimiento Administrativo Sancionatorio en su contra, por el presunto incumplimiento al numeral 1 del artículo 165 de la Ley Orgánica de Telecomunicaciones”.
Esta estación ha sido objeto de amenazas en reiteradas ocasiones por parte del alcalde del municipio Tinaco, José Rivas, quien en febrero de 2019 amenazó con cerrarla e invitó al dueño de la emisora a revisar “su parrilla de periodistas”.
Con esta medida del ente censor, 35 trabajadores (20 directos y 15 indirectos) quedan sin empleo, y los ciudadanos de al menos nueve municipios del estado Cojedes sin acceso a otro medio de comunicación. De acuerdo con las cifras del estudio Atlas del Silencio, Cojedes ya contaba con el 88,47% de su población en desiertos informativos. Este cierre aumenta la escasez de información en la región.