Brasil, 26 de febrero de 2020 (Abraji)
La periodista Vera Magalhães, de TV Cultura y del Estado de São Paulo, fue víctima de doxxing (exposición de datos personales) y de la creación de un perfil falso en un red social, después de haber revelado el martes (25 de febrero de 2020), en un informe publicado en el sitio web de BR Político, que el presidente Jair Bolsonaro ha estado enviando mensajes de apoyo a un acto contra el Congreso Nacional, a través de su WhatsApp privado .
Cualquiera que cree un perfil falso de red social puede ser considerado civil y penalmente responsable. En el ámbito civil, es responsable de los daños morales y en el criminal, de la falsedad ideológica. Si la plataforma es notificada por una orden de exclusión de contenido específica y no elimina el perfil, la plataforma también puede ser considerada responsable. La Corte de Justicia de São Paulo posee jurisprudencia sobre el tema, y en 2018 condenó a Facebook por omisión, por no haber eliminado el perfil falso de un médico, a pesar de que fuese notificada.
Según un informe publicado en el estado de São Paulo, se creó una cuenta falsa de WhatsApp a nombre de Vera Magalhães, y se distribuyeron mensajes fraudulentos en otras redes sociales. También se compartió un cobro, de 2015, de la escuela donde estudian los hijos de la periodista, poniendo en riesgo la integridad física de su familia, además de exponer asuntos privados. Abraji considera que la exposición de datos personales es una amenaza para los periodistas y una restricción a la libertad de prensa.
Abraji también considera como lamentable y preocupante que el presidente de la República use un canal de comunicación, incluso privado, para propagar un acto que va en contra del equilibrio de los tres poderes y contra la democracia de hecho. Como figura pública que ha jurado respetar la Constitución, Jair Bolsonaro debe saber gerenciar sus acciones en lo que concierne a la población.
Desdeñando el trabajo de la prensa, insta a sus seguidores a atacar a los periodistas en las redes sociales, en una clara campaña de linchamiento virtual. Su hijo, Eduardo Bolsonaro, diputado federal (PSL-SP), publicó una respuesta agresiva en Twitter a la afirmación del periodista de que en 2018 Jair Bolsonaro había dicho: «Si una bomba H cayera en el Parlamento, ténganlo por seguro de que habría una fiesta en Brasil».
Como si eso no fuera lo suficiente, los partidarios del presidente prácticamente lincharon al periodista usando frases machistas, sexistas y misóginas. «El periodismo profesional ya ha enfrentado resistencia de este tipo en otros gobiernos, pero la escala y la virulencia no poseen precedentes y buscan cuestionar la existencia de hecho de la prensa libre», dijo Magalhães, y agregó que los periodistas sufren dos veces. «El objetivo es sacarnos nuestra credibilidad. Es algo que no sucede en relación con los periodistas hombres».
Organizado por activistas conservadores y programado para el 15 de marzo de 2020, el acto compartido por Bolsonaro levanta banderas antidemocráticas, contrarias al Congreso Nacional y en defensa de los militares y del gobierno actual.
Entre los ataques, Magalhães también fue insultada por trabajar en la TV Cultura, una empresa de comunicación pública en el estado de São Paulo. Periodista con más de 20 años de carrera, es presentadora del Roda Viva, así como es columnista del Estado de São Paulo y editora del sitio web de BR Político.
Muchas ofensas fueron encaminadas a la periodista aludiendo a los recientes ataques propagados por figuras públicas y en las redes sociales contra la periodista de Folha de S. Paulo Patricia Campos Mello, lo que refuerza el carácter machista y misógino de los insultos.
Magalhães dice que los ataques son frecuentes, pero se intensifican cuando publica un informe que exponga las acciones del actual gobierno. «Los ataques son mucho más virulentos contra las mujeres», señala.